Resumen
Este estudio cualitativo hecho en Mallorca
muestra que la población joven adulta percibe
que la educación sexual recibida ha sido superficial
e insatisfactoria, con una falta de profundidad
en temas cruciales como género, violencia
sexual y relaciones saludables. La variabilidad
en los entornos familiares y sociales influye en
su desarrollo sexual y, aunque internet ofrece
información, también expone a desinformación.
Los participantes solicitan una educación
inclusiva que respete la diversidad sexual y de
género, y que abarque aspectos como el placer,
el consentimiento y la diversidad de prácticas
sexuales. Proponen integrar mejor la educación
sexual en el currículo escolar y ofrecer
recursos educativos también a adultos.
