Resumen
En este artículo me propongo describir y analizar la experiencia argentina en relación con la Ley Nº 26.150 de Educación Sexual Integral (ESI), a partir de un recorrido por los antecedentes históricos y normativos que posibilitaron la sanción de la Ley en el año 2006, como también aquellos posteriores con los que esta dialoga.
La Ley Nº 26.150 establece la creación del Programa Nacional de Educación Sexual Integral (PNESI) e introduce una serie de elementos novedosos, entre ellos su obligatoriedad desde el nivel inicial hasta la formación docente, como también su abordaje transversal a lo largo de todas las asignaturas, aunando aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y éticos.
Sin embargo, la efectiva implementación de la ESI continúa enfrentándose a diversos desafíos. Para comprender este escenario presente, analizo los inicios de las políticas públicas vinculadas a la sexualidad desde una óptica sanitarista y de asistencia social, como también los debates suscitados por el surgimiento de la educación sexual en las escuelas. Luego focalizo en el marco normativo argentino, los avances en la ampliación de derechos y los retos pendientes a futuro. Por último, propongo un balance de la temática y sus ideas centrales.