Resumen
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La práctica de sexting se define de forma general como el intercambio de contenidos multimedia de índole sexual a través de Internet. Las tasas de prevalencia de sexting en adolescentes muestran una gran variabilidad y sus correlatos sociodemográficos todavía no son concluyentes. Esta variabilidad dificulta conocer su alcance real en la vida de los adolescentes. Estudios críticos sobre el tema atribuyen la heterogeneidad de la prevalencia a cuestiones como la falta de una definición operativa de sexting y a la ausencia de un instrumento estandarizado para su medida. Esta tesis doctoral tuvo tres objetivos secuenciados: (1) estudiar empíricamente la prevalencia de sexting en adolescentes y explorar sus correlatos demográficos; (2) examinar y revisar sistemáticamente el efecto moderador de factores susceptibles de explicar la heterogeneidad de la prevalencia, y (3) desarrollar y validar una escala de medida de sexting para adolescentes. En un primer estudio se examinaron las prevalencias de envío, recepción y reenvío de sexts en una muestra de estudiantes españoles de educación secundaria, identificando también diversos correlatos sociodemográficos, familiares y educativos. Los resultados animaron a explorar más a fondo las prevalencias anteriores con una revisión sistemática y un metaanálisis de efectos mixtos de tres niveles, estimando la prevalencia de sexting y analizando aspectos conceptuales y metodológicos susceptibles de moderar la heterogeneidad de la prevalencia. Los resultados obtenidos en el metaanálisis aportaron argumentos para construir una medida de sexting orientada a cubrir elementos conceptuales y metodológicos de su definición, que inciden en las tasas de prevalencia. Por lo tanto, se desarrolló la Escala de Sexting para Adolescentes (A-SextS) y se validó en una muestra de estudiantes españoles de secundaria. Los resultados del primer estudio sugirieron altas prevalencias de envío, recepción y reenvío de sexts. Ciertos subgrupos de estudiantes, en especial los varones, los adolescentes más mayores, los usuarios de un mayor número de redes sociales y con un mayor consumo de tiempo utilizando dispositivos tecnológicos y redes sociales, tenían más probabilidades de haber participado en el sexting. El segundo estudio reveló que la prevalencia de sexting aumenta con el tiempo y la edad. Los resultados destacaron la importancia de atender a aspectos metodológicos, como las técnicas de muestreo, los procedimientos de administración y el marco temporal de las medidas de sexting. Aspectos conceptuales, como el formato multimedia de los sexts, también moderaron la prevalencia de sexting. En consecuencia, en el tercer estudio se desarrolló y se validó un instrumento para medir sexting que superara las deficiencias conceptuales y metodológicas detectadas previamente. Sobre la base de estos tres estudios, se formularon propuestas de investigación futura y sugerencias para la implementación de medidas educativas preventivas.